Con el tiempo han cambiado algunas caras, pero la política de este gobierno es la misma que practicaba Amparo Piqueras: el autoritarismo, la negación al diálogo y un afán por hacer las cosas de cara a la galería, sin una línea clara de hacia dónde ir y por qué. Ésto ha hecho que sólo en el primer año de gobierno los socialistas ya acumulen varios frentes abiertos con la ciudadanía. Conflictos que se podrían evitar con un estilo de gobernar diferente.
CARRER COMERÇ

Han cortado la calle Barcelona, entre Pas del Llop y Àngel Guimerà, sin asegurar una alternativa viable. La calle Comerç es demasiado estrecha y no está debidamente urbanizada. ¿Solución? Una vez cortada la calle Barcelona, derriban una finca municipal para, a la larga, ampliar la calle Comerç.
Resultado: dos calles bloqueadas y largas colas de vehículos para salir a la carretera. Estamos de acuerdo con la peatonalización de algunas calles, pero han empezado la casa por el tejado, sin informar a los vecinos y evidentemente ignorando las protestas.
MERCADO SEMANAL

Hace muchos años que el mercado de los jueves está en una ubicación provisional. Impide el acceso de los vecinos a sus parkings y genera muchas molestias en el entorno. Incluso el Síndic de Greuges se pronunció.
El gobierno anterior, para resolver la cuestión, preparó un cambio de emplazamiento cerca de la Vailet. El gobierno actual rechaza esta actuación y vuelve a poner a los vecinos en pie de guerra.
CORTE DE LAS CALLES MOSSÈN JOSEP DURAN Y NOU

Otra chapuza. El corte del tráfico en estas calles ya estaba previsto, pero se ha aplicado de golpe. Y sin medidas de dinamización que animen el comercio de la zona y inviten a la gente a pasear.
Más de 20 comerciantes han presentado quejas al Ayuntamiento pidiendo que se replantee. Por cierto, la cámara del inicio de la calle todavía no tiene capacidad sancionadora.